Desde una melodía, pasando por un peluche
o prendas de vestir, hasta momentos o paisajes, es importante que los seres
humanos aprendamos a ser felices porque nos lo merecemos y sabemos apreciar la
belleza de nuestro mundo y no porque en pareja contemplamos esta belleza. Un amanecer tiene que ser bello para ti
porque lo disfrutas y no porque estás en pareja.
Esto no va en contra de los bellos
recuerdos que todos guardamos, va dirigido exclusivamente a saber apreciar
nuestro valor y el de la naturaleza, como seres humanos por encima del apego
emocional por otro ser, apego que puede privarnos luego del disfrute de nuestro
mundo por una situación de dependencia similar al adicto, que con alcohol canta y disfruta
del karaoke pero solo cuando toma unas cervezas, del resto le incomoda
cantar, porque así acostumbró a su cuerpo y emociones.